Hola, qué tal. Soy Milena.
Uno debería ser capaz de escribir sobre uno mismo, sin miedo y sin remordimiento. Uno debería asumir que le gusta la música de “plancha” y cantar duro canciones de “La oreja de Van Gogh”; uno debería escribir, sin pena, que no se baña los domingos y que odia salir de la casa este día de la semana.
También, debería uno, ser capaz de aceptar que ha engordado y que dejó de ser talla S.
Sin dolor, también debería uno poder decir que tiene miedos e inseguridades, pero que se hace el bobo para que estos no se noten mucho. Uno debería aceptar que no lee tanto como quisiera y que escribe menos bien de lo que debería.
Que ama las chocolatinas y cambiar el mundo en dos minutos; que lo de afuera no es lo de menos, pero que lo de adentro es lo que más llena. Uno debería asumir también que prefiere quedarse en casa viendo una película que salir a beber un trago en la calle, pero que tomarse una cerveza en las tardes, tiene su encanto.
Uno debería aceptar que tiene sueños imposibles, amores platónicos, luchas internas; pero también que ha cumplido metas, amado con el alma y ganado pequeñas batallas.
Uno debería poder describirse a uno mismo en muchas o pocas palabras, sin temor a equivocarse, porque si se equivoca, sabe puede volver a comenzar.
En la foto: yo caminando por la Avenida Florida de Buenos Aires- Argentina. Porque uno también debería aceptar, que le encanta que lo miren en la calle.